Aplicando un mínimo de mantenimiento, sus ventanas, puertas o cerramientos en general, pueden mantenerse mucho más tiempo en perfecto estado.
LIMPIEZA DEL ALUMINIO Y CRISTALES
Utilice un paño humedecido, únicamente con agua o con algún limpiador de su confianza que no sea agresivo, para no dañar las superficies y secar con un trapo suave y absorbente.
No utilice elementos abrasivos, como esponjas de viruta de acero o similares.
En caso de hojas correderas es importante limpiar regularmente los carriles.
BISAGRAS Y HERRAJES
Si observa que los mecanismos de cierre y maniobra ofrecen cierta resistencia o producen ruidos, aplicar unas gotas de aceite de engrasar en las juntas de los elementos móviles. Abra y cierre la ventana varias veces para que el aceite se distribuya uniformemente.
En ningún caso se debe aplicar aceites o sprays de los denominados "aflojatodo".
GOMAS
Es recomendable que una vez al año se aplique una capa de aceite protector a las gomas de sus ventanas y puertas, esto evitará que se resequen por efecto del sol y el aire. Emplear un paño realizando una leve fricción a lo largo de las gomas.
CONSERVACION
Las ventanas deben ser tratadas con cuidado, evitando los golpes y esfuerzos innecesarios.
No aplicar fuentes de calor sobre las superficies.
En caso de observar alguna anomalía en la superficie o en los mecanismos, no intente forzarlos, llame a su instalador.
Las persianas hay que manejarlas con suavidad, no dejandolas caer de golpe, ya que puede dañar seriamente el mecanismo.